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Hoy en día tener una marca personal es tan o más importante que un resumen curricular, porque es la huella que nos diferencia del resto.
En este artículo conocerás este concepto que se ha potenciado con el uso de las redes sociales y cómo puede ayudarte a destacar a nivel profesional y comercial.
La marca personal o personal branding es la forma en la que la gente nos recuerda o identifica, al igual que sucede con una marca comercial. Es la huella que nos caracteriza y hace únicos.
En la actualidad su desarrollo permite tener un mayor éxito profesional y diferenciarte entre la competencia del mercado laboral y profesional.
De hecho, el presidente ejecutivo o CEO de Amazon, Jeff Bezos, resume el concepto de marca personal con la frase: “aquello que dicen de ti cuando no estás en la sala”.
La primera vez que se escuchó sobre personal branding fue a través de Tom Peters, quien escribió un artículo llamado “The Brand Called You” o “La marca llamada tú”.
Es importante destacar que todos tenemos una marca personal y esta incluye nuestras aptitudes, experiencia a nivel profesional, habilidades y recorrido personal, por lo tanto, tenemos una huella única que nos distingue.
Hacernos conscientes de ello y potenciar nuestra propia marca personal nos facilita alcanzar metas y objetivos de manera más sencilla.
El personal branding está compuesto por tres características principales, ellas son:
Este componente es clave, porque es el que define lo que decimos y hacemos. Por eso es común escuchar a otros describir a sus pares como: “Pedro es motivador”, “María es muy enérgica”. Ese factor hace parte de tu marca personal y permite diferenciarte de otros a través de tus gestos.
Nuestro discurso también habla de quiénes somos, ya que, este es un elemento destacable en el personal branding. En este caso también incluye la forma en la que vestimos, nuestro aspecto físico e incluso, las fotos que elegimos para nuestras redes sociales o la que colocamos en nuestro currículo o LinkedIn cuando salimos al mercado laboral.
Por eso debemos alinear nuestra comunicación para que la imagen de marca sea la misma tanto en el mundo online como fuera de Internet.
Así como una imagen dice más que mil palabras, los actos también. Es por ello que la mejor manera de proyectar una marca personal fuerte es siendo coherentes, es decir, alinear lo que decimos con la forma de decirlo. No basta con decir que somos responsables, debemos acompañar la palabra con acciones que vayan en consonancia.
Estos tres elementos no solo aplican para “influencers” o personas que vemos en redes sociales, esto forma parte de tu imagen como persona, de tu perfil profesional e impacta en tus relaciones con el entorno. Por lo tanto, la invitación es a indagar en ti y practicar el autoconocimiento para que puedas definir tu estrategia de marca personal siendo auténtico.
Para poder desarrollar e impulsar todo el potencial de tu propia marca personal debes cumplir con algunos pasos que te dejamos a continuación:
Ya te adelantábamos en la sección anterior el poder del autoconocimiento. Esto es lo que te permitirá saber cuáles son las fortalezas y oportunidades que tienes destacar y ser una marca personal fuerte a nivel profesional y personal.
Plantéate preguntas como: ¿Quién soy? ¿Qué quiero hacer? ¿Qué objetivos quiero lograr? ¿Qué puedo aportar a los demás? ¿Cuáles son mis valores? De allí podrás obtener información valiosa para tu marketing personal.
El primer paso que debes dar para definir tu marca personal es saber para qué quieres trabajarla y de allí nace tu objetivo. Puede ser tan variado como: crecer a nivel profesional, destacar en el mercado laboral, alcanzar determinado anhelo, vender más, generar una red de contactos, etc.
Esto significa que conozcas muy bien a quién te quieres dirigir, bien sea desde el punto de vista personal, comercial o profesional. Al saber aspectos de la otra persona, podrás crear una mejor estrategia de personal branding que te ayude a comunicarte mejor con tu público objetivo. Aquí puedes incluir desde agentes de recursos humanos hasta proveedores, clientes, colegas, e incluso tu perfil de pareja ideal.
Una buena marca personal tiene una historia que contar. Cuenta la tuya. Quién eres y por qué haces lo que haces. Te servirá para entrevistas de trabajos, para conseguir financiamiento para tus proyectos comerciales, generar confianza, posicionarte en el mercado, etc.
Esta historia por lo general está muy relacionada con tu público objetivo, porque esto hace que haya empatía y se vean reflejados en lo que ofreces como marca personal.
Ya lo hemos dicho, la coherencia es lo más importante para una marca personal de éxito. Es lo que te generará credibilidad a largo plazo. Ten este punto en cuenta al momento de definir tu historia y tus objetivos de marca personal.
Las relaciones sociales son las que te permitirán cumplir tus objetivos, por ello formar tu propia red de contactos es clave. Tanto si quieres conseguir un mejor empleo, contratar personas o buscar proveedores. Las redes sociales como LinkedIn son muy utilizadas hoy en día, porque allí no solo interactúan profesionales, sino que tienes acceso directo a gerentes de recursos humanos y dueños de empresas sin intermediarios.
Hoy en día el social media y las redes sociales pueden ser un gran trampolín para impulsar o posicionarte como una marca personal fuerte. Elige la que más se asemeje a tu perfil profesional y donde se encuentre el público que quieres conquistar y comienza a generar contenido de valor. Puedes hacerlo a través de tú propio blog utilizando SEO para posicionarte con tus palabras clave, un podcast, Facebook, Instagram, etc.
Ten en cuenta que necesitarás de una imagen corporativa o imagen de marca que también debe responder a tu marca personal. Elige colores que se parezcan a lo que quieres transmitir.
Si estás pensando a largo plazo, registrar tu marca es algo que debes hacer, porque te permite asegurar que tu marca personal no será copiada o usada por otra persona y además te da mayor credibilidad ante proveedores y te brinda protección jurídica.
Tener una buena marca personal te genera muchas ventajas, no solo desde el punto de vista de la imagen de marca, sino también a nivel profesional y comercial. Algunas de ellas son:
Si estableces tu propia estrategia de marketing y cumples con los pasos de una buena marca personal, puedes convertirte en referencia dentro de tu sector y sobresalir entre la competencia, bien sea profesional o comercial.
Tener tu propia marca personal te desmarca del resto. Imagínate que estás postulándote a un empleo, muchos competirán contigo por la experiencia profesional, por lo que ese no es un valor diferenciador, en cambio, tu actitud, forma de comunicarte y lo que comunicas sí puede hacer que destaques y eso es marca personal.
Mostrar autenticidad, coherencia y constancia te proporciona credibilidad frente a tu interlocutor y eso hará que alcances cualquier objetivo que te hayas propuesto y tengas mejor experiencia en el camino que quienes deciden no trabajar su marca personal.
Esto se traduce en más posibilidades y oportunidades en cualquier área que quieras desarrollarte.
Si tienes una empresa, tu marca personal puede potenciarla en el mercado, porque le da mayor alcance e impulso a través de tus mensajes.
Como ves, los beneficios de trabajar tu marca personal impactan directamente en tu desarrollo profesional y comercial. Es momento de trabajarla y decirle al mundo de qué estás hecho.
Si ya tienes desarrollada tu marca personal y necesitas ayuda con la facturación a tus clientes o proveedores, Konta puede convertirse en un gran aliado para ti. Ingresa a nuestra página web y descubre más.
