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En México, entender cómo pagar impuestos puede parecer complicado. Sin embargo, hoy existe una régimen fiscal que permite cumplir con las obligaciones tributarias de una forma más sencilla: se trata del Régimen Simplificado de Confianza, conocido como RESICO.
Si eres una persona física y estás buscando una opción más fácil de cumplir con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), este régimen puede ser para ti. No obstante, debes saber que no todas las personas físicas pueden inscribirse en RESICO, por lo que es fundamental que te informes de los requisitos para poder hacerlo.
El RESICO surgió en 2022, como una respuesta innovadora del SAT para agilizar y facilitar el proceso del pago del Impuesto sobre la Renta (ISR). Este nuevo esquema busca simplificar las complejidades fiscales al brindar a las personas físicas con ingresos anuales inferiores a 3.5 millones de pesos la posibilidad de tributar de manera más sencilla, veloz y eficiente.
RESICO establece tasas de impuesto sobre la renta más reducidas, lo que se traduce en un alivio financiero considerable para quienes se encuentran dentro de los regímenes fiscales contemplados por este sistema. Las personas físicas que operan bajo actividades económicas específicas, pueden esperar un proceso tributario más claro y menos engorroso, permitiéndoles centrarse en el desarrollo de sus actividades económicas y fomentando una relación de confianza entre los contribuyentes y las autoridades fiscales.
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Diferencias entre RESICO o Régimen General ¿Qué me conviene?
Estos son los pasos que te pueden ayudar a identificar si te puedes inscribir en RESICO:
El primer paso es revisar si tus ingresos anuales no superan los 3.5 millones de pesos. Este es el umbral máximo de ingresos para calificar para el RESICO.
Asegúrate de que tus ingresos provengan de alguna de las siguientes categorías que conforman el Régimen Simplificado de Confianza:
Exclusión de trabajadores asalariados
Si eres un trabajador asalariado, ten en cuenta que no podrás unirte al RESICO; en su lugar, seguirás bajo el Régimen de Sueldos y Salarios.
Una vez que te hayas inscrito en el RESICO, podrás obtener una serie de beneficios fiscales que podrían simplificar notablemente tu vida financiera. Una de las ventajas más atractivas es la aplicación de tasas de pago del Impuesto sobre la Renta (ISR) que oscilan entre el 1% y el 2.5% de tus ingresos. Estas tasas, diseñadas para ser mucho más bajas que las de otros regímenes fiscales y pueden traducirse en ahorros sustanciales en tus obligaciones tributarias.
Aunque no tendrás la capacidad de deducir gastos en el RESICO, la reducción en las tasas de pago podría contrarrestar este aspecto. Estas tasas atractivas son un incentivo clave para quienes buscan una forma más sencilla y favorable de cumplir con sus deberes tributarios, aliviando la presión financiera y permitiendo un enfoque más claro en la gestión de los asuntos fiscales.
Las obligaciones fiscales que debes cumplir como persona física son clave para mantener tu situación fiscal en orden. Estas incluyen la presentación de declaraciones mensuales y anuales de impuestos sobre la renta (ISR), que determinarán tus pagos provisionales y el monto total de impuestos a pagar.
Cada mes, tendrás que presentar tu declaración, antes del día 17 del siguiente mes. Sin embargo, esta operación será muy sencilla, ya que el sistema calculará el Impuesto Sobre la Renta (ISR) basándose en los ingresos que ganaste durante ese mes. No obstante, este cálculo no toma en cuenta el Impuesto al Valor Agregado (IVA) ni las deducciones.
Para la declaración anual, se calcula el ISR total del ejercicio fiscal, tomando en cuenta todos los ingresos efectivamente percibidos y aplicando una tasa correspondiente a la tabla anual. Este cálculo se realiza sin incluir el Impuesto al Valor Agregado (IVA) ni aplicar deducciones. Es importante restar los pagos mensuales realizados y cualquier retención del 1.25% efectuada por personas morales.
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Guía: aprende paso a paso para realizar tu declaración anual
En un escenario fiscal a menudo complicado, el RESICO se presenta como un aliado valioso para aquellos que buscan un enfoque más simple y beneficioso para sus asuntos fiscales. No obstante, la presentación de declaraciones precisas y oportunas es crucial para evitar problemas con la autoridad fiscal. Por ello, en Konta, te ayudamos a llevar tu contabilidad y a cumplir de forma correcta con tus obligaciones tributarias. ¡Contáctanos!
